jueves, 25 de agosto de 2011

Parásito hematófago ladrón de tranquilidad. Chinga a tu madre!

¿Por qué succionas mi sangre maldito engendro microscópico?!
Justo en estos momentos, mi querido y ocioso lector... siento una espantosa e insana comezón en al menos 3 dedos de mi pie izquierdo, muslo derecho y a lo largo de mi brazo así como en el hombro. No sé cuántas han sido las picadas de ese puto mosquito pero estoy seguro de que han sido las suficientes para desesperarme y sentir ganas de invocar al Chapulín Colorado. Desgraciadamente tan prestigiado y honorable super héroe dejó de existir hace ya algunos años :(

Cochina sanguijuela que te has robado mi sangre para el orgasmo de tus estúpidas crías por poco unicelulares, me las pagarás u.u y es que en lo que escribo este simple y absurdo posteo se me ha escapado tres veces. Antes de apagar la luz la lucha continuará y espero que el paseo de mi sangre en el interior de semejante bestia termine en la palma de mis dos manos.

Si yo no le quito sangre a los mosquitos... por qué ellos a mi sí? Al Apá nomás no le pican los mosquitos... ustedes saben, superioridad mortal. Jum!

2 comentarios:

GILBERTO dijo...

HIJOS DE SU PUTA MADRE!!!, COMO ME CAGAN LOS MOSQUITOS, LAS MOSCAS, LOS BOBITOS Y LOS JEJENES!!!!, MUERTE EMINENTE A ESTOS CABRONES!!!! >:O

WOWOWO dijo...

JAJAJJAJAJA TAN INSIGNIFICANTES EN TAMAÑO Y TAN ENORME CAGADA EN TU DIA QUE TE HACEN XD JAJAJAJ, QUE IRONICO :P

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