Bravo! Salvemos al mundo con una puta cruz de oro!
La iglesia no necesariamente me quita el sueño pero cada que aparece la imagen de un hombre que se dice representar a Dios sobre la tierra se me revuelve el estomago y está por demás decir que las nauseas son de odio y desprecio. Desprecio a la cara hipócrita de la iglesia (si es que tiene alguna otra), de lo estúpido que es el ser humano al querer mamarle los huevos al papa cuando se trata sólo de otro hombre más con un cargo de poder y el respaldo de lo divino, jajá.
Vamos, pederasta... discúlpame por haber deseado a la mujer de mi prójimo pero qué le voy a hacer? Está más buena de lo que jamás podrías haber soñado.
