El domingo es el primer día de la semana. Para algunos el segundo, para otros el tercero pero al fin y al cabo el domingo es domingo, el domingo es domingaba, el domingo no es tan hermoso como el sábado, el domingo no es tan horrible como el lunes; el domingo el domingo así como tú eres tú y yo soy yo, el Cristal es el Cristal, el Otto es el Otto y Metallica perdió su brillo un par de décadas atrás.
Cuando el domingo grita como corrido que el sábado se esfumó y que la semana se acerca me pongo a pensar en el poder que pueden tener los acordes bien acomodados de una buena canción y el cómo una materia dada de baja es dinero perdido a la basura.
Cuando yo era joven los domingos eran cálidos, ahora son más calientes, cuando yo era viejo no dejaron de ser azules y purpuras con tintes de café colgate. Cuando yo fui el Cristal por primera vez, la psicodelia me hizo ver al domingo como un día superior y sorprendente.
Yo soy yo, tú eres tú, yo soy yo.... tú eres tú... yo soy el Cristal.
El Domingo es Domingo y nada más.
Saludos ;D!