Tres hurras y un CHINGA TU MADRE al señorón que nos dejó el último comentario en la entrada anterior. Gracias a ti, mi estimado anónimo, Hawaiimas abre los ojos y desentume los dedos para escribir un poco y actualizar el espacio.
No es gracias a tus aportes que estamos aquí realizando posteos que entretendran a algunos, aunque pocos pero significativos lectores pero disfruto al arrojarte un chinga tu madre desde lo más profundo de mi corazón y el éxtasis orgasmico que me provoca hacerlo me hace proferir un suspiro de alivio y placer. Hawaiimas vuelve a su programación regular a partir de hoy.
Gracias por su paciencia y visitas en estos días de muerte (flojera y compromisos) para el Blog.